El estrés es la respuesta del organismo a los retos que nos rodean. Aunque un poco de estrés puede ser beneficioso, el estrés a largo plazo puede causar muchos problemas y tener importantes consecuencias a corto y largo plazo en la salud física y emocional. En el caso de los adolescentes, la respuesta física al estrés es mucho más rápida, ya que la parte de su cerebro que puede evaluar con calma el peligro y poner fin a la respuesta de estrés (el córtex prefrontal) aún no está completamente desarrollada. Aunque nadie puede evitar todo el estrés, podemos enseñar a nuestros hijos a afrontarlo y a encontrar estrategias positivas para hacerle frente.
Los signos de estrés en los jóvenes pueden manifestarse de varias maneras. Si tu hijo empieza a mostrar estos signos, es posible que el estrés sea demasiado para él solo y necesite ayuda:
Irritabilidad e ira: Los niños estresados pueden ser más pendencieros o irascibles de lo normal.
Cambios de comportamientoLos niños cooperativos se vuelven muy discutidores. Los niños sociables de repente no quieren salir de casa.
Problemas para dormir: Un niño o adolescente puede tener dificultades para dormir, dormir más de lo habitual o quejarse de sentirse cansado todo el tiempo.
Cambios en la alimentación Comer demasiado o demasiado poco.
Enfermarse más a menudo. El estrés suele manifestarse en forma de síntomas físicos. Los niños estresados suelen tener dolores de cabeza y de estómago, y acuden con frecuencia a la consulta de la enfermera.
Experimentación con drogas. Un mecanismo de afrontamiento negativo que puede provocar mayores problemas de salud física y mental.
La buena noticia es que hay varias formas en que los padres y tutores pueden ayudar a sus hijos a aprender a gestionar y afrontar el estrés. Un buen comienzo es ser consciente de sus comportamientos y emociones y generar confianza, para que se sientan cómodos confiando sus sentimientos. Anime a su hijo a probar las siguientes estrategias. Consejos para ayudar a los niños a afrontar el estrés Incluir:
- Duerme un poco.
Dormir es esencial para la salud física y mental. Dormir lo suficiente ayuda al organismo a crecer y desarrollarse con normalidad, además de facilitar la atención. Mientras que los adolescentes necesitan entre 8 y 10 horas, los niños más pequeños necesitan entre 9 y 12 horas.
- Encuentra tiempo para la diversión y la tranquilidad.
Encuentre actividades o aficiones que les aporten alegría y ayude a sus hijos adolescentes a encontrar formas de incorporarlas a su vida. Mientras que a algunos chicos les encanta ir de una actividad a otra, otros necesitan más tiempo de descanso. Lo ideal es encontrar un equilibrio saludable entre ambos.
- Centrarse en los puntos fuertes.
Cada persona tiene su propia magia, es decir, sus propios puntos fuertes, talentos y características. Al centrarse en los puntos fuertes y reconocerlos, pueden mantener sus factores estresantes en perspectiva. Las investigaciones también han descubierto que escribir sobre aquello de lo que uno se siente orgulloso o agradecido puede aliviar los síntomas de ansiedad y depresión.
- Realizar actividad física
El ejercicio no sólo nos libera del estrés, sino que también hace que se liberen en el cerebro sustancias químicas (endorfinas) que nos hacen sentir mejor. El ejercicio puede ser tan sencillo como un paseo enérgico al aire libre, tirar un par de canastas con los amigos o una improvisada fiesta de baile. Estar al aire libre en la naturaleza tiene su propia eficacia para aliviar el estrés, así que combinar ambas cosas puede reportar beneficios añadidos.
- Hable con alguien
Controlar el estrés puede ser difícil. Tener un adulto de confianza con quien hablar, como un padre, un profesor o un terapeuta, puede ayudar a los niños a ver las cosas con perspectiva y a encontrar soluciones. Trabaje con sus hijos para elaborar una lista de adultos a los que puedan acudir en busca de orientación cuando lo necesiten.
Sentirse estresado es una parte natural de la vida para todas las personas, independientemente de su edad. Aunque no podemos proteger a nuestros hijos de él, los padres y tutores pueden modelar estrategias de afrontamiento saludables y apoyarles en la gestión de los momentos difíciles cuando es demasiado para ellos solos. Tampoco está de más recordarles una y otra vez lo mucho que se les quiere y que cuentan con el apoyo de su familia y amigos para superar los momentos difíciles.
Escrito por Susan Foley - Educadora sanitaria
Recursos
- Asociación Americana de Psicología, "Cómo ayudar a niños y adolescentes a controlar su estrés" 19 de octubre de 2022
- org, "5 consejos para ayudar a los adolescentes a afrontar el estrés"
- Paccione-Dyszlewski, Margaret R. PhD, "Adolescentes, estrés y cómo pueden ayudar los padres". 11 de septiembre de 2020
- Willsey, Pamela S. LICSW, BCD, PCC, " 7 maneras de ayudar a los adolescentes a controlar el estrés", 1/16/20